París, Francia — La noche del lunes, las imágenes que mostraban a Brigitte Macron empujando con ambas manos a su esposo, Emmanuel Macron, al desembarcar del avión en Hanoi, generaron un intenso debate en Francia. La escena capturada por cámaras se convirtió rápidamente en trending topic, y sobre ella se especuló en medios y redes sociales si veían una agresión o simplemente un acto de confianza y cercanía.
El presidente francés salió al paso para aclarar la situación. En una rueda de prensa, Macron afirmó que la pareja —casada desde 2007, tras conocerse en la secundaria— “solo estaban discutiendo y, más bien, bromeando”. Añadió que las imágenes eran malinterpretadas y que, en realidad, la pareja estaba en un momento de complicidad, no de tensión. “Esto se estaba exagerando hasta convertirlo en una especie de catástrofe geoplanetaria”, expresó.
En los videos se observa a Brigitte extendiendo sus brazos y empujando a Macron con una mano en la cara y otra en la mandíbula, mientras él retrocede, girando la cabeza. Cuando parece darse cuenta de la presencia de cámaras, Macron sonríe y hace un gesto de saludo. Posteriormente, en las escaleras del avión, él le ofrece el brazo y ella lo ignora, caminando a su lado, en una actitud de afecto y confianza mutua.
Macron enfatizó que la imágenes y la reacción social reflejan cómo las redes sociales pueden distorsionar la realidad y alimentar campañas de desinformación. La oficina del mandatario afirmó que se trató de un momento de jovialidad que fue aprovechado para generar polémica, y pidió calma y reflexión ante la avalancha de versiones falsas y manipuladas que circulan en los últimos días.
Brigitte Macron, exprofesora y madre de tres hijos, fue compañera del joven Emmanuel en la escuela secundaria, donde ella supervisaba el club de teatro. Su historia, llena de sacrificios y proyectos compartidos, vuelve a ser protagonista en medio de estos rumores, que solo buscan crear divisiones donde solo hay amor y complicidad.
