El personal de la Coordinación General de Protección Civil y Gestión de Riesgos del estado ha estado trabajando de manera coordinada con la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial, así como con los elementos del Cuerpo de Bomberos, atendiendo un total de 637 incendios, tanto forestales como urbanos, en lo que va del 2025.
Bernabé López Santos, titular de la Coordinación General de Protección Civil, compartió que gracias a la colaboración entre diversas áreas, se ha logrado una efectividad del 100% en la atención y liquidación de estos siniestros, utilizando recursos tanto por tierra como por aire mediante el apoyo de los helicópteros del gobierno del estado. “Nuestro personal se traslada y atiende lo más rápido posible los incendios registrados. Las oficinas de protección civil municipales han dado resultados, al igual que Medio Ambiente con sus brigadas y la CONAFOR, lo que ha permitido que no tengamos familias lesionadas ni viviendas colapsadas,” destacó López Santos.

El gobernador Alejandro Armenta también subrayó la rápida y eficaz respuesta ante los incendios, que en promedio ascienden a dos por día. Este esfuerzo demuestra el compromiso y la labor heroica de aquellos que se dedican a proteger las áreas afectadas.
De los 637 siniestros atendidos, 240 han sido forestales y 397 urbanos, afectando un total de 8,744.3 hectáreas. Las áreas más impactadas incluyen Tlachichuca, Libres, Tepatlaxco, Tetela de Ocampo, Huauchinango, La Fragua, Amozoc, Zacatlán, Tehuacán y la capital poblana. Hasta la fecha, solo un incendio activo se encuentra en la zona de acantilados, en los límites de Quimixtlán y Chilchotla.
La coordinación y eficiencia en la respuesta a esta problemática contribuyen significativamente a la seguridad ambiental y la protección de la población en Puebla, reflejando la importancia del trabajo conjunto entre las distintas instituciones gubernamentales para enfrentar y mitigar los efectos de los incendios. La administración estatal se mantiene alerta y preparada para continuar atendiendo cualquier eventualidad que pueda surgir en el transcurso del año.