En un operativo realizado en un club nocturno clandestino en Colorado Springs, la Administración de Control de Drogas (DEA) detuvo a más de 100 migrantes indocumentados y confiscó armas, drogas y un pasaporte mexicano. La agencia compartió imágenes en redes sociales del material asegurado durante la intervención, que ha generado gran revuelo mediático y especulación sobre la presencia de ciudadanos mexicanos entre los detenidos.
El operativo tuvo lugar en la madrugada del 27 de abril, cuando la DEA emitió un mensaje en sus redes sociales destacando que «nada bueno sucede después de las 3 a.m.». Adicionalmente, indicaron que, junto a las botellas y latas típicas de un club, se realizaron detenciones significativas en un entorno de diversión que rápidamente se tornó en un asunto de seguridad nacional.
El hallazgo del pasaporte mexicano generó sospechas y llevó a que, el 28 de abril, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, confirmara que hubo cinco ciudadanos mexicanos entre los arrestados. Durante su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum aseguró que los detenidos estaban en contacto con el consulado mexicano y que se encontraban bien: “Siempre tienen el apoyo de los consulados”, dijo.
Sin embargo, hasta el momento las autoridades mexicanas no han proporcionado más información sobre las circunstancias de la detención ni la legalidad de la estancia de estos ciudadanos en Estados Unidos. Este caso resalta la complejidad de la situación migratoria y los riesgos que enfrentan muchos indocumentados en busca de una mejor vida. Las autoridades seguirán investigando los hechos ocurridos en el club clandestino, mientras que se espera más información sobre el proceso legal de los detenidos.
