Jerusalén. — La ofensiva israelí en Gaza continúa generando una crisis humanitaria y un debate internacional acalorado. Tras días de intensos combates, las fuerzas de Israel han lanzado una amplia campaña de incursiones, con el objetivo declarado de reducir la capacidad de los grupos armados en la franja y recuperar el control total del territorio, donde ya dejan una estela de destrucción, desplazamiento masivo y violencia sin precedentes.
Desde la madrugada del martes, las tropas israelíes han avanzado en múltiples frentes, causando el desplazamiento de aproximadamente 350 mil palestinos y dejando a cientos de civiles atrapados en medio del conflicto. La comunidad internacional observa con preocupación, mientras las imágenes de hospitales destruidos, personas huyendo y calles arrasadas alertan sobre la gravedad de la situación.
La Realidad en Gaza — Según informes del Ministerio de Salud de Gaza, más de 65 mil palestinos han muerto desde el inicio de la ofensiva, en su mayoría civiles. La crisis en los hospitales, con faltas de insumos, agua y medicinas, ha provocado que muchas instalaciones reporten que el 50% de los pacientes han tenido que abandonar sus tratamientos o huir por falta de recursos y la amenaza constante de los bombardeos. La ONU y organizaciones humanitarias llaman a la comunidad internacional a actuar con urgencia para detener el conflicto y ofrecer asistencia a las víctimas.
Acusaciones y respuestas internacionales — En medio de las operaciones terrestres israelíes, el grupo Hamas ha acusado a Estados Unidos de actuar como mediador parcial y de respaldar las acciones de Israel. En una entrevista en vivo en el canal Al-Jazeera, un alto dirigente de Hamas refirió que Estados Unidos, en recientes reuniones, discutió una propuesta de alto el fuego que fue cancelada en horas, coincidiendo con intensas explosiones en Gaza. Líderes árabes y organizaciones internacionales condenaron estas acciones, calificando las operaciones como “una extensión del genocidio” contra el pueblo palestino.
Condena internacional y llamado a la acción — La comunidad global, a través de una coalición de organizaciones humanitarias, ha condenado enérgicamente la escalada del conflicto. Más de 20 organizaciones, incluyendo Save the Children, el Consejo Noruego para Refugiados y Anera, han solicitado que los Estados utilicen todos sus recursos políticos, económicos y legales para poner fin a la masacre y poner en marcha mecanismos que protejan a los civiles. La ONU ya ha concluido que en Gaza se está cometiendo un genocidio, y urge una respuesta internacional inmediata para detener la destrucción.
Control militar israelí y perspectiva futura — En las últimas horas, un gráfico militar de Israel indicó que las tropas esperan controlar todo Gaza, salvo una gran franja costera. Según autoridades militares anónimas, creen que aún permanecen entre 2 mil y 3 mil militantes de Hamas en la ciudad, además de túneles de tránsito que han sido utilizados para ataques y abastecimiento. La estrategia israelí se enfoca en destruir estas redes y establecer un control sobre la franja, en medio de una hambruna generalizada y un éxodo masivo de civiles que buscan sobrevivir.
El destino de Gaza — La comunidad internacional continúa solicitando una pausa humanitaria y negociaciones para frenar la violencia. Mientras tanto, los combates se intensifican, con impactos devastadores en la infraestructura civil, viviendas y hospitales. La emergencia humanitaria, sumada a las tensiones políticas, plantea un desafío sin precedentes para la paz y la estabilidad en una de las regiones más conflictivas del mundo.