A más de cuatro mil metros de altitud, y bajo la solicitud de una familia que no se rinde, la Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de Puebla desplegó un operativo especializado en la Laguna de Aljojuca, una zona de difícil acceso y visibilidad reducida. El objetivo: localizar indicios sobre una persona desaparecida.
Con apoyo de la Guardia Nacional, la Secretaría de Seguridad Pública estatal, buzos del Cuerpo de Bomberos y un binomio canino entrenado, se realizaron recorridos meticulosos en el agua con cámaras subacuáticas, cuerdas de seguridad y mapas sectorizados con base en análisis previos. Este método técnico busca maximizar resultados y reducir incertidumbre en entornos naturales complejos.
Juan Enrique Rivera Reyes, titular de la Comisión, explicó que la estrategia parte de un enfoque técnico y humanitario, instruido por el gobernador Alejandro Armenta. “El trabajo con las familias es clave. No se trata solo de buscar: se trata de acompañar”, afirmó. El Gobierno de Puebla reitera su compromiso de no dejar a nadie atrás.
