Nueva Jersey, EE. UU. — Borussia Dortmund y Fluminense empataron 0-0 en su primer partido en el Mundial de Clubes, disputado en el MetLife Stadium, en un encuentro marcado por la lluvia y una asistencia que fue menos de la mitad de la capacidad del estadio. La jornada, que favoreció claramente a los brasileños, tuvo pocas opciones claras de gol y se definió en un cierre con una sólida actuación de ambas defensas.
La mejor oportunidad de anotar fue para el cuadro sudamericano: a los 58 minutos, Agustín Canobbio remató con la izquierda desde el centro del área, pero su disparo fue detenido por el portero alemán, Gregor Kobel. En el minuto 59, Jobe Bellingham, hermano menor de Jude Bellingham del Real Madrid, debutó en el Dortmund como sustituto de Pascal Gross, en una entrada que intentó dar más presencia en zona ofensiva pero sin éxito.
El recién fichado Bellingham, al igual que Gio Reyna, preparado para jugar en Dortmund, permaneció en el banco. La afición en las gradas, en su mayoría de seguidores de Fluminense, replicaba cantando y ondeando banderas, generando un ambiente muy brasileño en el lugar.
El partido fue dominado en mejor forma por los brasileños, que tuvieron 14 disparos contra 7 de los alemanes, además de un 54.5% de posesión del balón. La última acción importante llegó en el minuto final, cuando el portero de Fluminense, Fábio, detuvo con una gran atajada un remate de Niklas Süle desde fuera del área, asegurando el empate.
Brasil y Europa comienzan igual en el Mundial, evidenciando la intensidad de un torneo que promete emociones en cada encuentro.
