Huauchinango, Pue. — El Gobierno del Estado de Puebla ha comenzado a utilizar de manera efectiva el fondo de contingencias de 250 millones de pesos, destinado a atender las emergencias provocadas por las lluvias recientes en la entidad. Con estos recursos, las dependencias estatales trabajan en la apertura de caminos, atención a familias y reconstrucción de las zonas afectadas, además de la entrega de apoyos como kits de limpieza y materiales para la rehabilitación en los municipios más dañados.
El gobernador Alejandro Armenta informó que, en coordinación con la Presidencia de la República, se conformará una nueva partida presupuestal específica de Protección Civil para reforzar las acciones en la Sierra Norte y otras regiones donde las lluvias generan daños significativos. La iniciativa busca mejorar la capacidad de respuesta ante futuras contingencias y fortalecer la seguridad de las comunidades.
Enfatizó que el objetivo central es apoyar a las familias en su proceso de recuperación, en especial a través del censo realizado por la Secretaría de Bienestar federal, que reveló que en Puebla hay 10 mil 811 viviendas con daños por lluvias y deslaves. Por ello, llamó a los alcaldes y presidentes municipales a destinar un porcentaje de los recursos federales en sus propios presupuestos para financiar programas de protección, reparación de caminos y edificios afectados, así como la instalación de sistemas de alertamiento en municipios con presencia de cuerpos de agua y ríos.
Por su parte, la secretaria de Bienestar, Laura Artemisa García, informó que hasta la fecha se han entregado más de 73 mil apoyos a familias que perdieron sus viviendas, sus bienes y sus espacios por los efectos de las lluvias y los desbordamientos. “La solidaridad y la coordinación entre todas las órdenes de gobierno son clave para garantizar la recuperación tanto social como física en la región”, aseguró García.
Finalmente, Natividad Cruz, una de las beneficiadas en la zona afectada, expresó su tranquilidad al contar con un albergue que le permite mantenerse segura mientras las autoridades trabajan en las obras de rehabilitación en su comunidad. La respuesta inmediata y la colaboración con la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), la Secretaría de Marina (SEMAR) y la Guardia Nacional permiten atender de forma integral a las familias damnificadas en el norte de Puebla, garantizando su protección y reconstrucción en los próximos meses.
