En la Franja de Gaza, los ataques israelíes han cobrado la vida de al menos 34 palestinos durante la noche del miércoles y la madrugada del jueves, incluyendo a 10 personas que esperaban atención fuera de una clínica, según informes de hospitales y trabajadores humanitarios. Además, el ejército de Israel reportó la muerte de un soldado en Gaza.
Los combates continúan sin signos de disminuir, mientras el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, se encuentra en Washington con el presidente Donald Trump para discutir un posible alto el fuego impulsado por Estados Unidos. Sin embargo, las esperanzas de un acuerdo a corto plazo parecen desvanecerse, ya que Netanyahu insiste en que Hamás debe ser destruido, mientras que el grupo insurgente busca poner fin a la guerra tras una tregua de 60 días propuesta.
El Hospital Nasser informó que en los ataques en Jan Yunis y Muwasi, en el sur de Gaza, murieron 21 personas, incluyendo una madre y tres hijos, además de otras dos mujeres. En Deir al-Balah, al menos 13 personas perdieron la vida, entre ellas 10 que estaban esperando recibir suplementos nutricionales en una clínica, incluyendo niños y mujeres.
El doctor Mithqal Abutaha, gerente del proyecto humanitario que atiende en la zona, expresó su horror por la escena: “Esto es una tragedia, una violación de las leyes humanitarias. Ningún niño que espera comida y medicamentos debería correr el riesgo de ser bombardeado”. La situación sigue siendo muy difícil y dolorosa para la población civil en Gaza.